La obsesión por la imagen
Marta no ha gozado nunca de una buena autoestima, se siente insegura y le cuesta decidir las cosas; depende mucho de lo que sus amigas digan o piensen de ella y como buena exigente, hace un esfuerzo diario maratoniano por gustar a todo el mundo. Marta intenta hacerlo todo de manera perfecta, y se decepciona con ella misma tras comprobar que nunca llega al listón que se ha marcado. Como no confía en sus habilidades personales y en esencia se siente mal consigo misma, intenta compensar su desagrado interno a través de lo externo, su cuerpo. Marta ha realizado varias dietas en su vida y siempre ha pensado que, cuanto más guapa pueda estar, cuanto más delgada y más atractiva, la gente la aceptará más y por tanto se sentirá más feliz.
El caso de Marta es muy habitual. Vivimos en una sociedad que enfatiza en desmesura el valor de la imagen. Nos bombardean con mensajes que constantemente nos vienen a decir lo mismo, que el éxito radica en una buena imagen (eso por supuesto significa delgadez, ausencia de arrugas y un cuerpo que se acerque a ser posible a la perfección). Sólo hay que abrir cualquier revista, encender la tele o caminar un rato por la calle; la gran mayoría de anuncios publicitarios destinados al autocuidado se encaminan hacia el valor de lo estético, a menudo con promesas imposibles y modelos retocados.
Es evidente que cuidarse, velar por la salud y por la imagen, es sano y conveniente. Pero deja de serlo y se convierte en obsesión cuando la imagen acapara gran parte de nuestras vivencias, condiciona nuestras experiencias y condiciona de forma radical nuestro bienestar. Desde la obsesión es fácil caer en adicciones al gimnasio, a las dietas, a las compras y en trastornos alimentarios, como la anorexia o la bulimia, enfermedades que son graves y deben ser atendidas de inmediato.
Las personas más susceptibles de caer en la obsesión por la imagen son aquellas que padecen baja autoestima, inseguridad, necesidad de controlarlo todo, una tendencia hacia la auto exigencia y el perfeccionismo y en definitiva, una insatisfacción personal, un vacío que, se intenta llenar a base de perder quilos, tratarse con mil cremas antiarrugas, acudir a cirugías a veces innecesarias y en definitiva, perderse en beneficio de una imagen perfecta. El no llegar a dicha perfección (y recordemos que la perfección es siempre una trampa, porque no existe), puede condicionar sobremanera la vida: por fuera la persona muestra bienestar, aunque esa fachada esconde una realidad interna de insatisfacción, ansiedad, tristeza y malestar. A menudo existe la creencia de que si alguien se entera de cómo uno se siente en realidad, dejará de caerles bien y se quedará solo; por tanto, la persona que vive obsesionada por su imagen persiste en su maratón diaria de mantener la fachada perfecta para no decepcionar y seguir andando.
¿Cómo puedes prevenir y/o frenar la obsesión por la imagen?
- Incentiva tu espíritu crítico.No creas todo lo que nos venden los anuncios y las revistas. Hoy en día todas las imágenes que se publican pasan por un proceso previo de photoshop. Por tanto, intentar parecerte a la imagen de una revista, es intentar parecerte a algo imposible, que no existe.
- Cuida tu alimentación:come de todo y disfruta de ello. La comida es y debe ser un placer, no un trámite para sobrevivir.
- Haz ejercicio, aunque de forma moderada.El objetivo debe ser mantenerte saludable, no quemar, adelgazar y pasarte horas en el intento.
- Examina tus cualidades personales.Todos y cada uno de nosotros las tenemos!
- Cultiva tus amistades y reposiciona tus valores.Piensa en algún amigo a quien aprecies mucho…. piensa en porqué le aprecias….seguro que no es por su físico!!
- Habla de aquello que sientes, no te lo quedes dentro.Ir acumulando emociones desagradables y no darles salida sólo contribuirá a que te sientas peor y te acabes agarrando más a la imagen.
- Realiza actividades que te diviertan.Arriésgate a hacer locuras que te hagan reír.
Si a pesar de estos consejos ves que te es difícil desconectar y reencarrilar tu bienestar, no dudes en contactar con nosotros.