Es el daño provocado por una alteración o interrupción en el aporte sanguíneo al cerebro que limita o incluso elimina el aporte de oxígeno y glucosa. Se utiliza más el término “ictus”. Dicho término engloba alteraciones como el infarto cerebral, la hemorragia cerebral y la hemorragia subaracnoidea.
Los factores asociados a la aparición de un ictus son: la edad, la hipertensión arterial y el sobrepeso, y existe una asociación con la diabetes, la hipercolesterolemia, y el consumo de tabaco.
En nuestra Unidad clínica de Neuropsicología realizamos una exhaustiva evaluación neuropsicológica con el objetivo de identificar, describir y cuantificar los déficits cognitivos, las alteraciones conductuales y emocionales, para así proporcionar un programa de rehabilitación adecuado a las necesidades de cada caso particular.