Podcast Psicología: La técnica del tiempo fuera
Temporada 01, Episodio 13 – ¿Cómo parar una discusión? La técnica del tiempo fuera
Itae es el primer centro especializado en la prevención y el tratamiento de la ansiedad, el estrés y el estado de ánimo. Somos un equipo de psicólogos y psiquiatras con una amplia experiencia.
Nuestro propósito es mejorar tu calidad de vida y por ello hemos creado también este podcast, porque sabemos que la psicoeducación es el primer paso hacia tu bienestar emocional.
Acompáñanos y descubrirás técnicas útiles para manejar tus emociones de una forma fácil y práctica.
Muy buenas soy Lorena Alfaro psicóloga de Itae y hoy traigo un podcast para esos momentos en los que estáis teniendo un conflicto que va a acabar en discusión y se os va a ir de las manos.
¿Qué hacemos en esos momentos? Quédate conmigo que te lo cuento.
Mensaje: Hola lorena, el otro día estaba discutiendo con mi pareja y acabamos gritando y ella se fue dando un portazo y mira que me sentó muy mal. Pero luego me dijo que lo que pasaba es que no quería seguir discutiendo de ese modo y quería que nos relajásemos. ¿esto es bueno hacerlo? Porque entiendo que tiene razón, pero es que en el momento me sentí fatal porque me quedé con la palabra en la boca. ¿hay alguna forma de no discutir? ¡¡Muchas gracias!!
Muchísimas gracias por tu mensaje. Recordad que si queréis participar podéis mandar un audio al 640101911 o escribirnos por redes a itae psicología.
Lo primero de todo, el objetivo de aprender técnicas para manejar los conflictos no puede ser no tener conflictos nunca más. Porque eso es imposible. El conflicto existe en cualquier tipo de relación: de pareja, de amistad, familiar, laboral… por lo tanto, pretender no tener conflictos es misión imposible.
Además, el conflicto gestionado correctamente, lejos de ser algo dañino, es muy beneficioso, ya que nos ayuda a mejorar en las relaciones y a conocer más a la otra persona. Ojo, estoy hablando de un conflicto bien gestionado, no de una discusión acalorada.
Por otro lado, evitar el conflicto tampoco es muy buena idea, porque estaremos cayendo en conductas pasivas, en las que no respetamos a nuestra persona.
Cuando un conflicto se convierte en una discusión acalorada, en la que hemos levantado la voz, hemos empezado a faltar el respeto o nos han levantado la voz, nos han faltado el respeto… es muy difícil serenarnos en el momento y gestionarlo bien. Es decir, si llegamos a este punto, por muy bien que empezásemos desde el principio, difícilmente nos vamos a calmar y terminar resolviendo el conflicto de manera adaptada.
Si ya empezamos el conflicto gritando y con agresividad, pues menos todavía. ¿Se pueden resolver asuntos desde la agresividad? sí. Lo habréis visto muchas veces. ¿resolver de este modo tiene consecuencias negativas? También. Además, muchísimas, dependiendo del caso serán unas u otras, pero seguro que beneficios no tiene.
Pues bien, llegados a este punto en el que la discusión empieza a subir de nivel, seguir ahí no va a solucionar el conflicto, por lo que es recomendable hacer un tiempo fuera o time out.
Esta técnica es muy beneficiosa, porque nos da un espacio para calmarnos, pensar, rebajar la intensidad emocional y poder actuar de una forma más serena y acertada. Nos da la posibilidad de autorregularnos.
Es importante aplicar la técnica en el momento en el que estamos empezando a notar que la ira está subiendo la intensidad y vamos a estallar. Mejor aplicarla aquí que cuando ya hemos estallado, dicho cosas que no pensamos y actuado de manera agresiva. Aunque si ya hemos llegado a este punto, mejor aplicar la técnica que seguir en esa discusión.
No podemos hacer un tiempo fuera yéndonos sin más, o yéndonos con un portazo, colgando el teléfono o diciendo “me voy que como me quede te voy a acabar pegando”. Esto es una amenaza y dificulta que la relación sea saludable.
Si hacemos esto acabaremos haciendo mucho daño a la otra persona, y aunque nos relajemos y luego nos pidamos disculpas… queda el daño hecho y a la larga eso hará que la relación no sea sana.
¿Qué podemos hacer? Pues retirarnos de la discusión, pero de una manera respetuosa.
Vamos a construir un mensaje asertivo, por pasos:
Primero vamos a especificar la conducta. Repito CONDUCTA. Especificar la conducta concreta de la otra persona que nos está causando el problema. Por ejemplo: estás gritando, estás golpeando los muebles, estás insultándome. No podemos decir estás de los nervios, estás de mal humor, estás siendo desagradable. Porque eso no es una conducta concreta.
Este paso es muy importante, porque tenemos que hacerle saber a la otra persona qué es lo que nos está molestando. Y estás de los nervios es algo muy inespecífico, incontrolable (no podemos controlar ponernos en este estado). En vez de eso podemos decir, estás apretando la mandíbula, estás moviéndote mucho, me estás mirando muy fijamente.
Estar de los nervios para mí es una cosa y para mi vecina es otra, pero apretar la mandíbula es lo mismo aquí y en china. ¿se entiende?
Si nos centramos en decir que nos molestan cosas inespecíficas la otra persona puede no entender bien por qué aplicamos el tiempo fuera.
Después vamos a explicar cómo nos sentimos en relación a esa conducta. Me estoy sintiendo muy enfadada, siento que no me estás respetando, me siento amenazada.
Vamos a explicar la razón por la que hacemos el tiempo fuera. Necesito coger aire y calmarme, quiero recapacitar sobre lo que ha pasado, creo que es necesario que nos tomemos un descanso para pensar, no estamos llegando a ningún lado y no quiero que acabemos diciendo cosas que no pensamos.
Indicaremos cuánto tiempo va a durar el tiempo fuera. Vamos a tomarnos 30 minutos, necesito 10 minutos para calmarme. Voy a pasar la tarde fuera para pensar.
Indicaremos también dónde vamos a ir. Voy a dar un paseo, voy a casa de mi hermana, voy a sacar al perro, voy a ver la tele a mi cuarto.
Y, por último, pero no menos importante, vamos a plantear continuar con la conversación cuando regresemos. Nada de hacer eso de nos calmamos y hacemos como que no ha pasado, las cosas se tienen que hablar y los conflictos se tienen que resolver, si hacemos el tiempo fuera, pero luego no retomamos la conversación, aunque sea para decir que menuda tontería de discusión y disculparnos mutuamente, lo que ocurrirá es que iremos guardando discusiones no terminadas, no cerradas que podrán salir en los próximos conflictos.
Lo juntamos todo:
Estás empezando a levantar la voz, eso me enfada muchísimo y me preocupa acabar teniendo una discusión, vamos a tomarnos un respiro y para pensar en lo que está ocurriendo. Voy a sacar al perro, que tardo 20 minutos, y así cuando llegue habremos podido pensar y retomamos la conversación de otra manera, que, seguro que logramos llegar a un acuerdo, ¿vale?
¿qué os parece? Menuda diferencia con dar un portazo e irte.
De esta manera la persona con la que estemos teniendo un conflicto es menos probable que se sienta violentada y estaremos respetándola, a la vez que nos damos un espacio a nosotros mismos para poder regular nuestra emoción. Cuidamos y nos cuidamos, esa es la clave.
Si quieres seguir aprendiendo y disfrutando de cómo ser más estable emocionalmente y vivir una vida plena y feliz, puede seguir escuchando nuestros podcasts y si lo necesitaras puedes solicitar tratamiento con nosotros en Itae Psicología.
Muchísimas gracias por escucharnos, si te ha gustado este episodio, dale a LIKE y compártelos en redes sociales, recuerda que si necesitas atención individualizada ya sea presencial u online, estamos a tu disposición en itaepsicologia.com.
Hasta el próximo episodio, un abrazo.
También puedes disfrutar de todos nuestros podcast en tu plataforma favorita: